Prologo

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La lluvia de otoño golpeteaba las ventanas empañadas de el auto, suspiros ahogados por besos apasionados salían de este, dos amantes en pleno acto de unir sus almas y cuerpos en uno solo se encontraban dentro de este en la parte trasera.

- te amo... - soltó cerca de su oído en un suspiro, con aquella voz ronca que lo mataba lentamente.

actualidad

Despertó sudoroso y con un pequeño problema en los pantalones, la lluvia golpeteaba la ventana de su habitación, aun era de noche, el cielo nublado se podía visualizar por las pequeñas rendijas que dejaba la cortina gruesa de aquella habitación, todo estaba oscuro, con excepciones de varios minutos cuando los relámpagos iluminaban la habitación de una forma tenebrosa, a su parecer, a su lado el cuerpo desnudo de su pareja se hacia presente, lo miro por unos leves segundos hasta que decidió levantarse.

Apresurado camino hasta el baño, encendió la luz y se miro al espejo, pequeñas  bolsas negras comenzaban a formarse bajo sus ojos su rostro estaba mas desgastado, la edad le estaba cobrando factura, aun cuando su pareja insistía que la edad le sentaba de maravilla y amaba su rostro maduro, el sabia que ya no parecía de veinte años, a sus treinta y dos, sentía que tenia mas de cuarenta años cargando en su espalda y las ultimas noches, se sentían mas pesadas.

El mismo sueño recurrente que lo hacia despertar con una erección, el mismo cada noche, por mucho que quisiera huir, algo dentro de el sabia que ya no podía hacerlo, que era momento de afrontar su pasado, aun cuando ya habían pasado mas de ocho años. Con sigilo camino hasta la habitación, de su buro en la parte mas oscura y recóndita de este, saco una pequeña caja de galletas, como aquella que las abuelas usan para guardar sus hilos y agujas, salió de la habitación con esta enfrente sus manos, fue a la cocina, se preparo un café humeante, camino hasta la sala y dejo la caja y su taza en la mesita de centro encendió una tenue luz de aquella gran sala y abrió las cortinas dejando ver el amplio cielo nublado, estaba a mas de diez pisos en el aire, si no hubiera lluvia podría apreciarse la ciudad de noche la cual era una vista maravillosa desde aquella ventana, se sentó frente a la caja y soltó un suspiro.

- aquí vamos... 

susurro para nadie en especial.

Con pesar abrió aquella caja, dejando ver, cartas, fotografías, recortes y una pequeña rosa marchita, una sonrisa de melancolía se formo en su rostro, rebusco entre estas y encontró la carta numero uno, la abrió y comenzó a leer.


Querido taehyung:
"si estas leyendo esto... es porque ya no estoy a tu lado... "





n/a:


ta cabron ... no?

volví!!!

primero que nada disculpen las faltas de ortografía, segundo, este es mi primer fanfic así que no esperen mucho xd, generalmente no me gusta escribir fanfics pero hare una excepción para ver que tal me va esta vez.

gracias por leerme, los amo chorrocientos.

nos leemos luego <3


(si quieren tristeza extema escuchen la cancion :3)

Eternal - TaegiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora