Parte 1

1.4K 129 10
                                    


Su historia había empezado como una clásica historia cliché, donde el más atractivo de la escuela secundaria llamaba la atención de toda joven, mientras el sentía un aborrecimiento por él, un pequeño odio. Claro en nivel secundaria él se mantenía lo más alejado de aquel popular chico, aunque había un factor diferente a como se presentaban en las películas, ya que ese chico popular no era un presumido al contrario era extremadamente reservado, mientras que él era conocido como el chico gruñón y asocial de la escuela. Las pocas interacciones que tuvieron fueron en la biblioteca donde el chico popular le entregaba algún libro que ayudara a la tarea o trabajo que se encontraba realizando, o simplemente darle el libro correcto para ayudarle a comprender el tema que presentaba alguna dificultad.

Por decisión de sus padres el estudio en una secundaria diferente mientras que su "hermano" fue inscrito en otra diferente, al otro lado de la cuidad donde Vivian, él y su wuxian eran como hermanos, ya que los padres de wei trabajaban en el extranjero en constantes viajes, los jiang lo criaron desde pequeños, y desde jardín de niños habían estado juntos, pero yu Zǐyuan, su madre decidió que debían ir a escuelas diferentes a partir de la secundaria, fue asi que se quedó solo los tres años de ahí.

Al iniciar la preparatoria todo cambio, ahora el chico popular era su compañero de clase, claro todas las chicas suspiraban por el mientras eran ignoradas olímpicamente, y para la suerte de jiang cheng fue nombrado compañero de carpeta del famosísimo lan Wangji, ahí es donde todo inicio, pese a conocerse solo de vista, ahora debían convivir mas ya que en todos sus proyectos debían trabajar con su compañero de carpeta. En un inicio había una tensión, solo trabajaban durante horas clase, sin excederse de las horas establecidas, con el pasar de los días, jiang cheng descubrió la tranquilidad de convivir con Wangji, no debía regañarlo por ser demasiado escandaloso, o meterse en problemas, podía insultar, maldecir, quejarse, llegar con él con su mal carácter por el que era conocido y no recibiría ninguna re-probativa, no se alejaba, no lo abandonaba.

Eras dos chicos solo que se acoplaron mutuamente, lan Wangji era muy reservado, un hombre de pocas palabras, solo decir lo necesario, pero eso era bien para jiang cheng, no debía pensar mucho, porque con el silencio se sentían cómodos, trabajaban excelente, no debía pasarle tareas o recordarle ser más dedicado a los estudios, que con el tiempo Wangji se empezó a ser a la costumbre de quedarse parado en el árbol frente a la escuela, leyendo un libro hasta escuchar el – buenos días señor perfección- de jiang cheng, para responderle con un buenos días y emprender camino hasta su aula y asiento.

Es su casa era lo mismo, wei wuxian muestra mejores resultados que tú, ¿no te da vergüenza?, su madre siempre comparándolo con su hermano, regañándolo por cualquier cosa, si wuxian pasaba sus materias con excelentes calificaciones pese a saltarse clases, mientras él debía dedicar horas de estudio para mejoras sus calificaciones, aun sin alcanzar a su hermano, jiang cheng, deberías dedicar más tiempo a tus estudios, trabaja más en tu paciencia, a-xian, ¿Qué te gustaría como premio por tus reconocimientos, para su padre nada era suficiente si provenían de él, pero si era su hermano le aplaudiría hasta porque fue detenido por la policía, él lo sabía, no era del agrado de su padre por el parecido en su carácter de su madre.

A-cheng, a-xian, ¿Qué quiren como premio por sus logros?, finalmente su hermana, aquella hermosa chica, que jiang cheng y wei wuxian creían era un ángel caído del cielo, la única que los veía por igual, sin comparaciones, los mimaba por igual, regalándoles hermosas sonrisas que le calmaban hasta el más horrible día. El no odiaba a su hermano, no, el odiaba ser comparado por sus padres, odiaba que esas comparaciones hicieran pelear a sus padres, a pesar de que wuxian lo llevaba a sus límites de paciencia lo adoraba, no se lo diría claro, pero lo hacía, era un buen hermano, pese a ser demasiado ruidoso y travieso.

lotus cloudDonde viven las historias. Descúbrelo ahora