Emi: (sonríe más) Perdón, nos conocemos?
Nico: No?
Emi; (ríe y mira a la mujer de Nico) No lo sé
Carla: Amor, si vos qué sos el que parece conocerla no está seguro
Emi; Claro (ríen) Por ahí íbamos juntos a la primaria y no me acuerdo
Nico: No, no. Debo haberme confundido, disculpame
Carla: Tragimos un whisky
Emi; (agarra la botella y la mira) Gracias, pero no hacía falta que traigan nada
Nico: (carraspea y se pasa los dedos por el cuello de la camisa)
Carla: No podíamos no traer nada
Emi: Recién importado de Escocia, no?
Carla: Sí, mi familia es de allá y nos suelen mandar botellas de vez en cuando. Tenemos tantas que qué mejor que compartirlas?
Emi: (sonríe) Muchas gracias, de verdad. Pueden dejar los abrigos ahí (señala un perchero) Voy a llevar esto a la cocina y de paso le aviso a Piettro lo que quieren tomar (mira a Nico) Cerveza, vermut, vino?
Carla: (se acerca al perchero y deja su cartera) Yo por el momento solo un vaso de agua, por favor (se acomoda el vestido)
Nico: (con tono agradable y sonrisa desafiante) Yo un vermut, blanco. Con una aceituna y una rodaja fina de limón
Emi: (sosteniendole la mirada sonríe) Enseguida (se va)
Carla: Que grande la casa para dos personas, no? (Mira los dos pisos más que hay sobre sus cabezas)
Leandro: (baja acomodandose la corbata) Nicolás!
Nico: (sonríe) Leandro, buenas noches (se saludan) Todo bien?
Leandro; Muy bien (mira a Carla) Hola, qué tal? Encantado
Nico: Carla, él es Leandro, mi jefe. Leandro, ella es Carla, mi mujer
Carla: Un gusto (se saludan) Nicolás habla tanto sobre vos
Leandro; Cosas buenas, espero (ríen)
Nico; Por supuesto. Ya te lo dije, sos el mejor jefe que tuve nunca
Leandro: Me vas a sacar los colores y recién empezó la noche! (Ríen de nuevo)
Nico: Conocimos recién a tu mujer, no sabía que estabas casado
Emi: (se acerca radiante) Pasamos al living? Ahora nos traen las bebidas
Leandro; Por supuesto. Por acá, por favor (les hace un gesto para que pasen)
Nico: (mira a Emilia)
Emi: (lo mira. Lentamente se le va dibujando una sonrisa)
Nico: El baño? Me gustaría ir ya, así me evito el tener que ir después
Emi: Tenés uno en el primer piso. La primer puerta que vas a ver a la izquierda
Nico: Gracias. Permiso (se va)
Emi: (lo sigue con la mirada)
Leandro: Así que la mujer de Nicolás, mira. Por lo jovenes que son, jamás habría imaginado que son marido y mujer
Carla: Sí (se sienta) Nos casamos hace un par de años igual
Leandro: (se sienta frente a ella) Hoy en día la juventud ya no se compromete con nada
Emi: (se sienta al lado de Leandro)
Leandro: Aunque siempre hay excepciones, claro (le acaricia la espalda a Emi tiernamente)
Emi: (sonríe y lo mira. Vuelve a mirar a Carla) Y qué onda? Tienen hijos? Piensan tenerlos?
Carla: (abre la boca para responder negando con la cabeza) No sabría decirte. No lo hablamos nunca. A mi me encantaría, estoy segura de que a Nicolás tambien porque le encantan los niños, pero si ni siquiera salió la charla es porque tal vez no es el momento
Emi; Claro. En estos casos es mejor no apurarse
Carla: Exactamente. Ustedes tienen hijos?
Leandro: No, no imposible. Con mi trabajo y el de Emilia es imposible organizarnos. Hay semanas en las que ni nos vemos, así que tener un hijo es lo más inviable del mundo para nosotros
Emi: *le suena el celular* Perdón (mira la pantalla) Voy a tener que atender, si me disculpan (mira a Leandro) Son los de la encuadernación
Leandro: A qué horas te llaman...
Emi; Cuando pudieron, están a mil todo el día. Permiso (atiende) Sí? (Se levanta y se aleja)
Nico; Se puede saber que carajo es esto?
Emi: Te dije que no vinieras a la cena, que te quedaras conmigo. Vos forzaste la situación
Nico: Emilia, esto es una locura. Sos la mujer de mi jefe
Emi: Yo no soy la mujer de nadie
Nico; (suspira) Dios, dios, dios esto no puede estar pasando
Emi: Ahora no es el mejor momento para hablar de esto. No entres en pánico
Nico: Como no voy a entrar en pánico? Me va a despedir
Emi: Nadie te va a despedir, Nicolás. Confia en mi. Baja y fingí que todo está bien
Nico: No se me da tan bien como a vos
Emi: Todo va a salir bien (corta y vuelve sonriendo divina) Listo, mañana me reúno con ellos (se sienta) Perdón de nuevo
Carla: Tranquila, todo bien
Piettro: (les sirve las bebidas)
Carla: Gracias
Emi: Bueno, contanos algo más sobre vos
Nico: (baja. Antes de entrar al living agarra una bocanada de aire. Entra y se dirige directo al lugar libre al lado de Carla) Espero que no les hayas contado que siempre dejo mis medias en el piso del baño cuando me ducho (rien. Agarra su bebida y da un trago largo)
Leandro: Hablábamos sobre hijos y trabajo
Nico: Ah (asiente) Imposible de compaginar (mira a Emi) Que? Ustedes tienen hijos?
Leandro: No, ni siquiera nos lo planteamos
Carla: Un poco como nosotros
Emi: Vos de que trabajas, Carla?
Carla: Soy ingeniera hidráulica
Leandro: Wow. Me dejaste totalmente sorprendido
Carla: (asiente) Suele sorprender, sí. No es un trabajo muy típico
Emi: Y de qué cosas te ocupas?
Carla: Solemos hacer construcciones relacionadas con el agua, para que se pueda usar como energía, para la irrigación, potabilización, canalización y un largo etcétera
Emi; Mira vos, que interesante. Yo también estoy fascinada, nunca conocí ninguna mujer ingeniera de nada y menos hidráulica. Te admiro un montón, te juro. Fue muy larga la carrera?
Carla: Bastante (ríe)
Emi: (asiente)
Nico: He de decir que soy el marido más orgulloso del mundo
Carla: (sonríe y le da un pico) Te amo
Nico: (sonríe y le acaricia la cara. Incómodo mira a Emilia)
Emi: Que suerte tenés, Carla, hombres así no abundan
Carla: No, la verdad es que no (mira a Nico) Tuve mucha suerte. Bueno y vos también (mira a Leandro) Sé de sobra lo entregado que es Nicolás al trabajo, así que debes estar totalmente contento por tu decisión de ascenderlo
Leandro: Por supuesto. Estoy más que contento con su rendimiento. Es un gran líder. Igual debo reconocer que parte de esta buena decisión, se la debo a Emilia
Nico: (abre la boca)
Leandro: Ella fue la que me insistió para que lo eligiera a él
Emi: (se acomoda el pelo detrás de la oreja) Sí, lo vi trabajar varias veces cuando fui a hacer papeles y me pareció de las personas más entregadas a la editorial. Además leí varias críticas tuyas, Nicolás, muy bien redactadas. Ahora que tengo oportunidad, debo felicitarte por tu buena expresión escrita
Nico: Gracias
Leandro: Tuvo muy buen ojo
Emi: Sabes que siempre lo tengo (lo mira)
Leandro: La intuición femenina (hace un gesto con las manos. Ríen)
Emi: Podés burlarte todo lo que quieras, pero existe, o no? (Mira a Carla)
Carla: Por supuesto que existe
Emi: Y por suerte, a mi me sobra. Por lo menos nunca me decepcionó
Piettro: Disculpen, la cena está lista
Leandro: Perfecto (se levanta) Traslademos la charla a la mesa, muero de hambre (se dirige a la mesa)
Carla: (camina detrás de él)
Emi: (pasa detrás de Carla)
Nico: (pasa detrás de ella. Aprovecha para tocarle el culo)
Emi: (sonríe sin girarse)
Nico: (se acerca más a ella hasta asegurarse de que lo escucha) Estás hermosa
Emi: (todavía sin girarse pasa la mano por su trasero acariciandolo y sube un poco por su cintura. Lo escucha reír a sus espaldas)
Leandro: Sientense como prefieran
Carla: (se sienta al lado derecho)
Leandro: Te sentas vos ahí, amor?
Emi: Sentate vos mejor, sabes que no me gusta presidir la mesa
Leandro: Como quieras (se sienta)
Nico: (se sienta entre Leandro y Carla)
Emi: (se sienta frente a Nico, al lado de Leandro)
Piettro: (comienza a poner los platos sobre la mesa) Para empezar, terrina de vegetales
Carla: Gracias
Leandro: Bueno, contame algo más sobre vos, Nicolás. De dónde sos? De capital?
Nico: Sí. Aunque tengo antecedentes familiares varios. Mi mamá es portuguesa, nació en Lisboa, pero se mudaron a Brasil cuando tenía a penas 10
Emi: Que lindo Lisboa, nunca fui, pero me encantaría
Leandro: Y vos Carla? Sos de acá?
Carla: Del interior, vine a capital para estudiar. Y entre estudio y estudio me terminé quedando porque sucedieron cosas (mira a Nico sonriendo)
Leandro: El amor siempre lo puede todo
Carla: Sí. Ustedes? Como se conocieron?
Leandro: La verdad es que de la manera más simple. Yo necesitaba a alguien que entendiera de contabilidad y me la mandaron a ella
Emi: (sonríe) Debo admitir que fui un hueso duro de roer
Leandro: No sabes cuánto
Emi: Siempre odié las relaciones sentimentales dentro del trabajo, pero... (Agarra la botella de vino y sirve en las copas) Igual no estamos acá para hablar tanto de nosotros, no?
Leandro: No, claro, queremos conocerte más, Nicolás. A penas hablaste
Nico: Soy un hombre de pocas palabras
Carla: Vos? (Ríe) Nada que ver
Nico: (se aclara la voz) Estoy un poco nervioso, debo admitirlo (tira la servilleta al piso) Los nervios empiezan a jugarme malas pasadas. Permiso (se agacha a buscarla. Aprovecha y mete la mano por el vestido de Emilia hasta acaricia su sexo)
Emi: (hace un movimiento brusco. Tose llevandose la mano al pecho)
Leandro: Amor, ey (se para)
Emi: Estoy bien, estoy bien (bebe un poco)
Nico: (sale de debajo de la mesa y se sienta)
Emi: (lo mira y sonríe) Ya está, fue un susto (se aclara la voz y mueve la cabeza para apartar su pelo) Uf...fuerte el vino, no? (Se da aire con la mano)
Leandro: Te parece?
Emi; Como es eso de que tu familia es de Escocia, Carla?
Carla: Mis abuelos. Se vinieron a vivir a Argentina cuando mi mamá y mi tío tenían unos 3 años. Él, cuando cumplió los 20 se volvió, pero mamá se acomodó acá y acá se quedó
Emi: Tambien me parece un lugar muy lindo Escocia, muy místico, no? Lleno de historia, leyendas. Mucho castillo encantado
Carla: Sí, es espectacular. Vamos a viajar este verano unas dos semanas con Nico
Nico: Sí
Emi: Llevenme con ustedes por favor (ríen)
Leandro: Está entre sus aficiones viajar?
Nico; Creo que es una afición que todos tenemos, no? Otra cosa es que la podamos llevar o no a cabo
Leandro: Buena respuesta
Nico: Considero más una afición visitar museos o hacer surf. Son cosas que hago más seguido
Leandro: Lo del surf me lo esperaba, pero lo de los museos para nada
Nico: Me gusta ir a perderme por los pasillos, así me conecto conmigo mismo. Mirar obras y descubrir qué te transmiten dice más de uno mismo que cualquier test psicológico
Leandro: Yo soy más de acción. Con Emi nos encanta hacer mountain bike, o escalada. Cuando podemos nos escapamos a algún lugar en el interior para poder practicarlo al aire libre. Estos últimos años estuvimos participando en el K42 en Villa la Angostura
Emi: Bueno eso es más de tu gusto, yo prefiero cosas más tranquis
Nico: Tenis, por ejemplo?
Emi: ... Por ejemplo. Sí
Leandro: Le dio justo en la tecla, no? Amas el tenis
Emi: (se saca el taco y directamente clava el pie en la entrepierna de Nicolás)
Nico: (se inclina hacia delante)
Carla: (lo mira)
Nico: (tose un poco y se acomoda en la silla moviéndola un poco más hacia delante) A mi el tenis me gusta más mirarlo, en general cualquier deporte disfruto más mirandolo que practicandolo
Carla: Bueno, no tan así. Salís a correr y vas al gimnasio
Nico: Sí, pero me refiero a deportes, deportes: fútbol, tenis, rugby, basquetbol
Emi: Sexo, no? (Se ríe tontamente tocándose la nuca. Mueve el pie despacio para excitarlo)
Nico: (se ríe bruscamente)
Leandro: Emilia
Emi: Era un chiste, siento que Nicolás está muy tenso con está reunión, o no? Estas acá, en la casa de tu jefe, es complicado. Querés causar buena imagen, no?
Nico: Sí, me gustaría
Leandro: Pero despreocupate por eso! Me caes bárbaro, de verdad, no te preocupes tanto
Carla: Claro amor, ya lo hablamos antes de venir, ser uno mismo es lo mejor en estos casos, o no?
Leandro: Totalmente, sí
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Aquel viernes (TERMINADA)
FanfictionDos desconocidos. Un encuentro ¿casual? en un estacionamiento. El fin de los principios