Una particular crónica del fin
«Siempre pensé que el humo era el alma de la materia, la esencia sagrada que se libera con el fuego. Mi cabeza sangraba por la violenta colisión contra la pared. Escuché un zumbido muy agudo que resonaba por todo mi cráneo. Sentía las manos y las piernas entumecidas, pero aún podía girar un poco el tronco.» Víctima de...