NADIE DIJO QUE FUERA FÁCIL
Abby lleva años enamorada de Dylan, el hermano de su mejor amiga Liv. Pero siempre ha sido un amor platónico, pues él es diez años mayor, vive en California y ni siquiera repara en su existencia. Tras verse plantado prácticamente en el altar por la que creía el amor de su vida, Dylan ha regresado a casa para curarse...