Dr. Smith
- Ya no quiero que me sigas haciendo daño Mario -refutó con espesas lágrimas brotando de sus ojos. - Lo intento Emma, créeme que lo hago, pero por más que quisiera no puedo dejar de hacerlo. ¡Dios! como odiaba a su primo, un primo que ni siquiera debería ser considerado como eso. - Quítate la ropa y acabemos con esto...