never stop believing.
-¿Cómo puede ser posible que en unos segundos, en una única acción, en una decisión y en un sólo objeto esté nuestros destinos ya predeterminados? Y aún más increíble, en una persona. Esa persona eres tú, Jack.- decía Elsa, mientras sus ojos azules me miraban, como si fuera la última vez que me fueran a mirar hacién...