Querida yo...
Querida yo, me siento muy herida. No estoy segura del porqué, pero creo que tiene que ver con el hecho de que la gente hipócrita suele mostrarme su verdadera cara. Puede ser por las malas miradas de los profesores, o por el rostro de decepción de mis amigos. No lo sé... tal vez sea porque a veces preferiría sentarme...