El chico del corazón de metal.
El corazón se puede sobrecargar de ilusiones falsas y amores perdidos. Y, cuando se desborda, acaba d e s t r o z á n d o s e .
El corazón se puede sobrecargar de ilusiones falsas y amores perdidos. Y, cuando se desborda, acaba d e s t r o z á n d o s e .
Me hablan, ¿a ti no? A lo mejor es que no los oyes. Pero estoy segura de que te hablan; hablan con todo el mundo. La diferencia está en que hay quién los oye y quién no. Necesitaba escribir lo que me susurran... seguiré más tarde. Vuelven a hablarme.
-Y, ¿cómo te llamas?- preguntó ella tímida. «Oh, tan tímida» pensó él. -¿Cómo crees que me llamo? -Pues... No sé... -Mírame a los ojos, niña. Ella lo hizo, y murmuró: -Keith- volvió a bajar la vista, avergonzada, y añadió-: Tienes... cara de Keith. -Entonces me llamo Keith. -Yo soy... -No necesito saberlo, con niña me...