Escritos de una chica indecente
Tenía quince y me rompieron el corazón. Esto son las secuelas.
Tenía quince y me rompieron el corazón. Esto son las secuelas.
esta historia va para la chica de la máquina de escribir y los versos rotos, para la chica de la sonrisa triste, para la chica vacía. tú siempre serás las chicas de pelos de colores y ojos vacíos en mis historias. espero que esto te saque, al menos un par de sonrisas y te haga sentir menos sola.
Digamos que esto no es un libro de poemas. Nunca sabré rimar, y las rimas son grietas. Esto es un homenaje a todos los versos perdidos en la pupila de las personas solitarias sentadas en las aceras mientras el mundo pasa por su lado. Al universo. A los corazones de cristal. A todos vosotros. Gracias.