La bella y la bestia
Ella era Ana, frágil como una rosa. El era Jadel, esclavo de sus impulsos. Único el día que les ataron esposas, ya no eran niños, crecieron, se hicieron adultos juntos. Todo marchaba bien o eso pareció en su primera luna de miel, juro serle de por vida fiel. Y ella a el, una historia como otra cualquiera. Prefiero no...