¡Mi Trabajo Domando a esta Monstruosa Princesa!
Un día como cualquier otro decidí hacer un enorme sacrificio; fui al mercado por orden de mi madre para comprar lo necesario para la comida de hoy, pero bueno, eso no importa, y tampoco la tragedia con la que me topé... - ¡OYE TU DE QUÉ ESTAS HABLANDO! ¡¿YA OLVIDASTE LO QUE ME HICISTE?! ¡ACOSADOR! - ¡OYE CUÁNTAS VECES...