Sam y el amor (en pausa)
A sus veinticuatro años Samantha ha tenido más rupturas románticas que vidas su gata. Ha vivido desde un romance de niños, hasta uno de adultos; fue engañada y también parte de un engaño. ¡Incluso fue parte de un harem! El asunto con sus relaciones no es que hayan sido una farsa, sino que cada uno de ellos no llegaba...