No me tientes, Álvarez.
Tras una dudosa merecida expulsión, los padres de Laura deciden mandarla a un internado privado de niños pijos. Se supone que mejoraría su conducta, pero sus dos próximas mejores amigas, Mar y Ale, no se lo pondrán fácil. Tampoco Lisa y sus perritas falderas, cuyo hobbie parece ser tocar la moral de las personas. ...