Mi Pequeña Pelirroja © (En edición)
A veces la felicidad también viene en rojo. COMPLETA Serena odia los pelirrojos, tanto, que acaba borracha y desproticando contra ellos en un bar de Nueva York. El dueño del bar, Alan Cook la escucha y decide bajarle los humos, porque claro, su cabello rojo resalta entre tantas cabezas. Pero por error termina acostán...