Una gota (Johnlock)
- ¿Qué harías si muero hoy?
Sherlock la a cargado con su hermano así que cada día debe volver a casa por su cuenta. En metro. Lo que no espera es encontrarse algo de interés en el. A veces uno se puede sorprender, aunque sean sólo diez minutos al día.
Cuando tu mejor amigo te patea por debajo de la mesa no hay muchas cosas que a uno se le ocurran pensar, los amigos de uno suelen actuar raro... ¿Verdad? //Todos los derechos a Sherlock BBC, yo sólo tengo el derecho sobre mi estado de obsesión.
¿Quién diría que la lluvia y la música de violín son la combinación perfecta para una declaración de amor?
Calidez. Calidez es lo único que Sherlock Holmes puede sentir estando cerca de John. Su querido John.
Para Sherlock, lo más importante es saber... que John no se estaba haciendo una mala impresión de él y... ¿algo más?
Sherlock está preparando algunas remodelaciones dentro de su mente brillante, algo que sea apto para dos...
Una cosa eran los rumores, y la idea de Sherlock y John juntos no era más que eso... simples rumores. Pero estar parado en su sala y darse cuenta de que los rumores eran mucho más que eso, no era nada comparado a lo que le pasaba a él en esos momentos.
Sherlock siempre ha sido curioso, y aunque muchas veces le dijeron que demasiada curiosidad no era buena... bueno, no siempre tenía que ser así.
Sherlock se niega a dormir, no es por un caso, ni tampoco es un experimento... Es el temor mismo, el que lo mantiene insomne.
Movió las piernas con cierta incomodidad... pero no. Al parecer sólo le dolían los músculos en conjunto, como si hubiera hecho un esfuerzo descomunal, como hacía tiempo no lo hacía.
Sherlock está viviendo algo que hasta ahora no había vivido... el miedo intrínseco de poder perder a John a manos de una mujer que no ha salido corriendo al conocerlo...
Por vueltas de la vida Arthur, el hijo de John, queda al cuidado de Sherlock. Fragmentos de todas esas vueltas.
John no es tan mental y cerebral como Sherlock, y mucho de su supervivencia se la debe mas a su instinto que a su inteligencia... Tampoco es católico, pero en cuanto a creencias, John puede llegar a creer... y Sherlock encontrara esto sumamente fascinante.
Porque con él se fue una parte de ti... Una parte importante de tu vida. Tu dolor es justificado, Sherlock.
Dado de baja en el ejército, John sabe que sus días están contados, si no consigue un Alfa, se lo conseguirán por medios legales. Aún no está listo para dejar que su vida y su libertad se vayan por entre sus dedos.
¿Qué era esto? ¿De verdad había una regla que le impidiera echar a alguien de su casa cuando ese alguien no era bienvenido? Nunca se lo habían dicho a él...
Sherlock reconoce que el humor de su doctor ha estado muy bueno para su gusto. Ahora... ¿Cuál es la razón de tan buen humor? Disclaimer: La imagen que utilizo para ilustrar esta historia pertenece a Sh2Jw.
John Watson está en un dilema, y él solito se metió en este... Ahora necesita conseguir a alguien que cuide a sus sobrinos, mientras su hermana y su cuñada intentan arreglar su matrimonio.
Sherlock creyó que su vida, al menos unos meses luego de su reaparición, sería un poco más tranquila... Tal vez procurando recuperar el tiempo que había perdido junto a su compañero. Jamás pensó en todo esto.
A simple vista quizás, John Watson no haya sido más que un hombre común; alguien a quien podía leer tan bien como a cualquier otro. Y sin embargo parecía ser tan único... Tan diferente al resto.
Jim ha decidido ponerse a enseñar en el castillo, Moran y él entraron realmente muy fácil... Ahora, ¿Cuál es la verdadera razón por la que ellos están allí?
Sherlock y su mente siempre lograron sorprender a John de las maneras mas varias posibles... Lo que el ex militar no creyó, es que una de esas maneras seria tan especifica.
Después de todo, tenía que pensar en que su palabra no valía... lo malo es que le había dicho muchas cosas que pensó que eran ciertas, y ahora dudaba de todas ellas.
Cuando John Watson fue dado de baja en el ejercito, creyó que su vida se había acabado allí mismo. Aunque no había pensado en ello verdaderamente, el puesto de detective privado no sería una mala idea.
Todo se basa en decisiones, desde las más pequeñas y triviales, hasta aquellas que pueden afectar no sólo a la persona que las toma, sino a su entorno entero.
Sherlock no sabe que hay fuerzas mayores a la de un criminal o una mente maestra... Pero llegará a averiguarlo cuando se interne en el mundo de la magia y santería.
John buscaba una idea para el regalo de cumpleaños de Sherlock... Y en verdad estaba buscando un buen consejo de alguien, porque no tenía ni la menor idea de que podía darle. Lo que menos buscaba era que su amigo se resintiera con él.
John y Sherlock tenían ganas de innovar, tal vez probar con eso de intercambiar parejas, pero lo que Sherlock no esperaba, fue que Mycroft se ofreciese junto con Greg a esta nueva experimentación.
Era el olor que estaba llenando toda la casa, todo el bendito departamento... Su departamento...