Me seduce el ingrato que quiere matarme
-Charlotte, te amo. -... ¿Eh? Al abrir los ojos, me di cuenta de que había poseído a la temida villana de la novela que escribí, y esto justo después de haber lavado el cerebro al protagonista masculino. ¡Qué locura! No quiero besar al protagonista masculino, ¡esto es un pecado! Para asegurar la paz y felicidad de mis...