Gracias a ti, aprendí a volar
La vida, la verdad es que la mejor metáfora para describirla es una montaña rusa, ya que esta a veces es fugaz, a veces va despacio, tiene subidas y bajadas, también presenta unos giros de 360 que nos voltean la cabeza y no sabemos donde estamos parados. Pero a pesar que esta sea tan distinta, tan efímera... tan comp...