Masacre En El Instituto
Tic tac, el sonido calmante y suave del reloj resuena por los silenciosos pasillos de la escuela, sobresaliendo el glorioso canto de las aves en busca de su destinada pareja. Cierro los ojos y sonrio centrandome en sus derivados y fluidos cantos que llegan dulcemente a mis oídos, relajando todo mi cuerpo y aflojando m...