Tan Sólo una Mirada ©
La vida de Isabelle West no era la de cualquier adolescente de 16 años que había empezado el instituto. Con un padre ausente, y una madre casi inexistente, Isabelle tenía que lidiar con los gastos de su sencillo apartamento ella sola. Para colmo, su trabajo era un tanto... Deprimente. Si a fregar platos se le podía ll...