La petite Constance.
Todos los seres han sido destinados a amarse. Es algo que nunca pudo evitarse. El amor se produce tarde o temprano, pero siempre encontrarás a tu media naranja, esa persona con la que compartes gustos, aficiones, sentimientos, carácter... Pero sobre todo el amor mutuo y sincero que comparten. Constance, neoyorquina...