Todo lo que nunca tuviste que luchar
Alguien como tú, que no conoce el sufrimiento y vive en una completa ilusión, no tiene el derecho y mucho menos el juicio para hacer observaciónes sobre alguien como yo... Déjame llevarte de la mano hacia lo inevitable, hacia el camino de rosas espinosas que no podrás evitar para siempre.