Bell, querida mía. Has estado apareciendo en mi mente cada noche, como si de un recuerdo se tratara, aunque nunca antes te había visto. Sé que eres esa persona de mis sueños, el castaño de tu cabello y la profundidad en tu mirada era imposible de confundir. Eres tú, y no pienso dejarte ir.
1 part