Cielo es consciente de cuan obstinado es y el como su carácter se vuelve de plomo cuando alguien se interpone en lo que cree correcto. Y es que el joven omega había forjado su temple cuando se había visto sólo y con una cachorra en brazos. Debiendo hacer caso omiso a los comentarios cuando le habían visto regresar a la aldea aquella mañana, con una barriga enorme y sin al parecer, un alfa que le acompañase. Es por ello que cuando se entera de que está a nada de perder el bosque que le vio crecer, no duda ni un segundo en subirse a uno de los árboles y quedarse allí si con ello evitaba le talasen. Desconociendo que una de las personas a cargo de ello, sería el alfa del que había huido semanas atrás y que había despertado en él sentimientos que con un corazón roto, creía haber perdido para siempre PRÓXIMAMENTE