Juan Alberto y María Isabel tenían una vida tranquila sin demasiadas preocupaciones hasta que, un día, una pequeña niña entra en sus vidas y hace que todo de un giro de 360°C para la pareja. Ambos, de la noche a la mañana, tienen que aprender a cuidar de un pequeño ser humano, mantenerla alejada lo máximo posible del ojo mediático a pesar de la fama que tienen y compaginarlo con su trabajo de creador de contenido en el caso de Juan y de actriz de doblaje y actriz de teatro en el caso de Maria Isabel, lo cual no les resultará fácil