Segundo volumen, continuación de Amethyst ¿Quién imaginaria que este sin fin de acontecimientos llevarían a Spreen a iniciar una nueva vida en las bellas hectáreas de una nueva isla?, ¿Quién pensaría que Vegetta tendría nuevamente en sus brazos a alguien que imaginaba perdido?. El camino entre el bien y el mal eran complicados de diferenciar, más cuando nuestros sentidos de la moralidad eran cegados por un deseo. Un nuevo comienzo, con nuevos compañeros, el manejar más de un idioma era primordial en este universo. El juicio divino era en su total relevancia cuando se trataba de estas tierras, misterios avecinaban a todos los habitantes, sentían ojos mirándolos tras cada paso que daban incluso dentro de sus hogares. ¿Esta bien dañar a los que amas?, ¿Era correcto aplicar "ojo por ojo"?. ¿El amor se expresa con acciones o con palabras?. •••••• Todo lo que ocurre en estás tierras, se queda aquí. El amor fraternal era genuino, cada uno lo expresaba de formas distintas, pero los secretos no son parte de esto, ¿O tal vez eran necesarios?, ¿Era correcto mantener a una persona escondida en tu hogar?. Entender lo que ocurría aquí tenía que ser visto por un ojo crítico que fuera capaz de unir todos los hilos de esta historia.