Greenville es la típica ciudad perfecta. buenos vecinos, casas grandes y espaciosas, lagos por doquier, parques en todas las esquinas y muchísimas zonas verdes. el plan de vida perfecto para toda familia, pero déjame decirte que todo lo perfecto nunca dura para siempre y en algún momento debe caer. es como un muy buen teatro montado que después de su obra prodigio caen en la quiebra desmantelando cada parte de el y revelando las verdaderas caras de sus principales actores. solo basta de un buen y real testigo.