Las féminas somos seres especiales, casi mágicos. Nos levantamos cada día con una voluntad y fortaleza a toda prueba, aún agobiadas por el cúmulo de tareas brindamos nuestra mejor sonrisa y demostramos que la responsabilidad y constancia tiene rostro de mujer. ¿Qué ocurre cuando una madre, amiga, hija o esposa se enfrenta a la traición, hipocresía o el desamor de sus seres queridos? En estos relatos se muestran representantes del género femenino fuertes y firmes en sus principios, dispuestas a cambiar su realidad y alzarse victoriosas ante los avatares de la vida.