Tras ser internada en un instituto psiquiátrico, a orden de sus padres, Luisa se enamorará perdidamente de alguien , alguien que le ayudara a superar sus problemas, que le dé eso que ella tanto quiere, ese sentimiento que es el culpable de que ella esté ahí. "¿Qué hay de malo en ser amada?" "¿Qué hay de malo en querer ser amada"? Saber que a alguien le importas, ¿sentirte importante para alguien? Esa era la pregunta que tanto la atormentaba, la misma que alguien le aclararía. Después de crecer sin amor sin ser importante para alguien, una persona iba a cambiar, pero ¿qué tan segura estaba que ese sentimiento que le iban a brindar iba a ser sincero? Al final se daría cuenta que todo había sido farsa.