Lea quien quiera leer, lloré conmigo el que quiera. El narrador no es un personaje ficticio, y puede que les resulte estúpido, idiota, inútil, manipulador, llorón, víctimista, molesto y demás... El narrador se trata de este ser tan repugnante de nombre Christopher Rodríguez Flores. No soy una causa perdida porque estoy trastornado, no, lo soy porque no quiero ser salvado.