En la vibrante ciudad de Tokio, donde las luces de neón brillan y la vida nocturna nunca duerme, había un joven llamado Gojo Satoru, conocido por su popular canal de contenido para adultos. Aunque su trabajo lo mantenía ocupado, Gojo era un tipo simpático y carismático, siempre con una sonrisa en el rostro. Sus fans lo adoraban, y él disfrutaba de la fama, pero había un detalle que pocos conocían: Gojo soñaba con encontrar el amor verdadero. Las imagenes no son mias y los personajes tampoco.