Al acercarse aún más, Aether noto una silueta. El corazón parecía que latía con más fuerza, sus pulmones contuvieron el oxígeno dentro y la vida parecía como si le estuviera por poner la prueba final para poder avanzar de una vez por todas. En medio del muelle la silueta de Xiao se hacía más clara. Sin duda era él.