Una enfermedad terminal acaba con la vida de Soobin, dejando a Yeonjun solo y destruido. Sus mejores amigos deciden ayudarlo regalandole un cachorro pero no uno cualquiera, sino uno especial, todo cambia cuando el pequeño cachorro Samoyedo llega a la vida de Yeonjun enseñándole lo que es la felicidad y el amor recordándole lo que Soobin le transmitía en vida.