Cerró los ojos por un momento, intentando regular su respiración poco a poco. Si, estaban bien, debía dejar de ser tan protectora con ellos... más o menos. Quería reírse de sus propios pensamientos pero, en el momento en que había retomado su caminata, distingio una silueta negra entre todo lo colorido del campo, sintiendo como una sonrisa esperanzada decoraba su rostro, se apresuró en acelerar el paso para llegar hasta el.
`˖⸙̭─ ❝¡Omori, por aquí!❞ ───casi parecía gritar, pero debido a que no estaban tan lejos gracias a su rápido actuar, simplemente termino por alzar la voz, casi similar a un grito. Una vez llego a su lado, se arrodillo un poco para poder estar a su altura, rodeando su pequeño cuerpo con sus brazos y, con una de sus manos, acaricio su corto cabello negro con cariño─── ❝estaba muy preocupada, me alegro de que estés bien... ¡pero no te vayas tan lejos esta vez! Si no conozco el lugar, entonces quédate conmigo y exploremos juntos ¿si?❞ ───a pesar de su pequeño regaño, mantuvo aquella cálida sonrisa que siempre la caracterizaba, dejando un corto beso en su frente.