estoy tan triste, razón número uno: siempre me atraso, dándome cero oportunidades de encontrarte. la número dos es algo ridícula pero, nunca imagine que hallar una simple posición cómoda en la cama sería difícil, ¿puedes venir y acomodar la fea almohada por mí? resulta que en trances desafortunados sólo soy bueno para hacer berrinches.