Y por qué si fuera poco, la vida aun me sigue alimentando de su fruto de la enseñanza. Creo que eso es lo que hacemos cada día, aprender para luego enseñar mejor para nuestro futuro.
En mi puesto tengo un dibujo de un gato. Sus grandes ojos son iluminados por la luz transcendental al que ve. Está observando hacia arriba. Arriba de ¿qué? No lo sé. Pero sea lo que sea que observe, le da esperanza por su forma de sonreír. No dejo admirarlo, y el gato no de admirar la esperanza.
BUEN DIA.
POR QUE… TODO EL SACRIFICIO DEL DIA, AL FINAL. HAY UNA RECOMPESA. TRABAJEN DURO SIEMPRE.