—No creí verte despierto hasta las 2 de la tarde como mínimo, y creo que esa nota tampoco. ¿Seguro de que si dormiste?
—Kim no dejaba de removerse inquieta entre sueños, apenas dormí unas 2 horas que fueron las que logré calmarla y dormirla… Tenerla entre mis brazos me hizo sentir en paz pese a no haber descansado bien.
—La entiendo, no debe ser fácil dormirse al lado de alguien que tiende a desaparecer con constancia. ¿Planeabas irte hoy también?
—Alex, ya tengo suficiente del tema.