¿Qué les parece un adelanto de la historia que publicaré a mitad del año?
“O tal vez, solo tal vez, aquel momento que cruce las hileras de las sillas cuando venía del baño, esperando a la siguiente clase, cuando me percaté del chico de la hilera de sillas que estaba en la pared, el cual tenía su cuaderno abierto en la última página, con una mano en la boca y otra con un lápiz dibujando muy para sí mismo, sin hablar con nadie más me hizo sentir que era hora de conocer a alguien.
…
— ¡Hola! —
¿Qué tan malo podría ser?
Él se sobresaltó, para entonces mirarme a su lado, con su ceño claramente fruncido y había detenido su dibujo.
¿Ya lo había arruinado?
— …Hola —al parecer no, porque respondió al minuto, tal vez no con la misma intensidad, pero sí con algo de ánimos, no enfadado, pero sí sorprendido.
Así que sonreí y quise seguir hablando— Soy Ilanith ¿cómo te llamas? —era alucinante la manera en la que me miraba, de hecho era la primera vez que sentía que una mirada de un chico no me molestaba o me hacía sentir nerviosa, se sentía bien.
— Jose —respondió. Me pareció confuso, porque ya había un “Jose” en el salón y ese Jose no me agradaba específicamente, porque ese Jose me veía con intenciones románticas y detestaba a los chicos que gustaban de mi y yo no gustaba de ellos.
— ¿Jose qué? —así que no quería llamarlo solo “José” tal vez el apellido me ayudaría.
Entonces respondió— Jose Luis —y los nombres conjugados como ese caso siempre eran utilizados para llamar a la persona y creía que “Jose Luis” se escuchaba mucho mejor que solo “Jose”.