¡Hola! ¿Que tal? Bueno, primero que nada, ¡Muchas gracias por seguirme! (Aunque no comprendo porque, pero vale). Me he tomado la libertad de darme un paseo por tu perfíl, y bueno... Si querés hablar, no dudes en hacerlo conmigo.
Recuerda, tranquila, no eres la primera en sentirte así, al igual que tampoco serás la primera en sentirte mejor, casi como si pudieras tocar las putas estrellas, todo mejora, aunque parezca no hacerlo.
¡Saludos, preciosa!