SoyEmmaArrynP

Princesa... bienvenida.

SoyEmmaArrynP

Ja, que gracioso. Pero yo no vendo, lejos de la capital.⸻Risita.⸻ Ni tampoco, conozco ha la gente de Dorne. Jiii. Solo soy un hombre exiliado de una humilde casa del norte. ⸻ Risita otra vez ⸻ Mi vida, sigue apegada con mis hechizos.
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SoyRainCarradine

Las mujeres somos más apetecibles a la vista de cualquier persona si permanecemos distantes, princesa. Suelen hacerse preguntas sobre qué hacemos con nuestro tiempo; si frecuentamos practicar artes del envenenamiento o entrenamos secretamente con nuestros más fiables caballeros, si metemos una verga en nuestro coño o si simplemente pasamos nuestro preciado tiempo leyendo o practicando danza. Lo misterioso es impredecible y lleno de posibles quizás. Dime, dulzura, ¿crees que permaneceré cercana a ti una vez que te sacies de mi presencia? 

SoyRainCarradine

Mh. Depende, cariño. Jugar el juego de la hipocresía es divertido cuando te cansas de ser el bueno por mucho tiempo. Tendremos que posponer esta charla, también. Con un poco de vino se nos hará menos tediosa.
            Es mejor ver que escuchar, dulce princesa.
            ¿Qué podría hacer una cachorra como tú? Eres demasiado pequeña como para imaginar lo mismo que yo. 
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SoyRainCarradine

Estamos en Dorne. El único sexo débil que hay, son quienes no luchan ni gozan del sexo tan bien como comúnmente lo hacemos. No tengo por qué cambiar mis palabras para agradar, ¿crees que los hombres lo hacen, Aliandra? Veo que aprendes rápido, dulzura. Me pregunto qué otras cosas aprendes con la misma velocidad. Trata a los hombres como los animales necios que son y no te llevarás ninguna decepción. Hay algunos objetos muy divertidos de usar, cariño. Mm, hablas demasiado. ¿Para qué otras cosas más sabes usar tu linda boquita?
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SoyRainCarradine

Es lo contrario, dulzura. Sólo los que anhelan inteligencia nos contemplarán, puesto que las mujeres guardamos los secretos de los hombres. Puedes ir a cualquier burdel y preguntarle a alguna puta común sobre su último cliente, y verás cómo te contará sobre el matrimonio de éste y todos los secretos que le contó; deudas, sus bastardos, incluso sus más patéticos sueños. Nada de eso nos interesa, pero los escuchamos por el mero hecho de ansiar información. Somos criaturas excepcionales, Aliandra, pero me temo que nunca se logra conocer a una mujer a fondo puesto que siempre nos reinventamos. Hm. La clase sobre el poderío femenino la dejaremos para otro momento, pero no dudes en que la retomaremos. ¿La dulce princesa planea usarme? ¿Qué cosas son las que corren por esa hermosa cabecita? Supongo que tendrá que ver con tu resistencia, cariño. No con la mía. 
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