Con nuevos logros y nuevas caídas, con nuevas heridas causadas y recibidas. Todos hemos sentido rencor a la vida, pero si nos la quitan odiaremos la muerte enseguida. La indesición forma parte del ser humano, luchamos por metas que al tocarlas no nos conformamos. Decimos "todo está mal" y cuando estamos viejos nos quejamos y hablamos de los viejos años añejos.