Desde que comencé la universidad, en especial después de los primeros dos semestres, dejé de escribir completamente. A veces leía, pero cada vez leo menos, pues siempre tengo bloqueo. Todos los años pongo un número menor al anterior en mi reto de lectura y aún así no logro cumplirlo. Estamos en febrero y todavía no he leído nada, apenas unos capítulos de Deja de Ser Tú de Joe Dispenza.
No sé por qué, no lo recuerdo, pero un día tuve ganas de reescribir mi antiguo borrador del Hikikomori Vampiro. Decidí aplicar la misma que con el primer borrador de Black Sheep: escribir capítulos cada que pueda sin pensarlo mucho. Al inicio fue sorpresivamente fácil, pero conforme avanza el semestre y llego al punto de la trama en el que me bloqueé en su época se ha vuelto más difícil. Me gusta escribir, en todos estos años no he parado de tener ideas para futuros libros, sin embargo, me cuesta. Me quedo en blanco, y no logro trabajar con la nada que produce mi cerebro. Sé que el borrador del Hikikomori Vampiro es súper bobo, cringe (como el anterior), y probabilmente mal escrito, porque casi no leo novelas y he perdido mucha práctica. Aún así, mi propósito para este año es terminarlo. Espero poder. A día de hoy releo Black Sheep y me pregunto a mí misma cómo lo hice, y si algún día podré volver a hacerlo.