Me duele el pecho de tanto sollozar. Me duele la cabeza de tanto llorar. La clara imagen de ti justo al lado de mi cama se repite una y otra y otra vez. El hecho de que ya no estés duele, y siento un gran vacío en mi pecho. Ahora… cuando llueva no estarás junto a mí, ¿dejara de doler? Si dicen todos, yo pienso que es como una cicatriz, sanara, pero te marcara y el solo verla… traerá el recuerdo que tanto duele. Catorce años conviviendo juntos, y no me siento completa sin ti. El recuerdo de cuando llegaste lo tengo clavado en mi mente, cuando nos perseguías hasta las escaleras pero no subías porque no sabías recuerdo como te saque la lengua, hasta que te armaste de valor y subiste, cuando me sentía triste iba a donde tú estabas te contaba, tú siempre escuchabas, apoyabas tu mediana cabeza en mi rodilla. Hasta el día de ayer, que estabas echado con tu cabeza encima de una de tus patas, me agache y te cante acariciándote, tu suave pelaje en mi mano, tu hermosa melena negra, se quedara grabado en mi memoria. Y pensar que hoy en la mañana el escuchar a mi hermano llamándote, el escuchar a mi segunda mamá decir; “Doncan se murió” hizo que me levantara y ahí te halle junto a mi cama, pero solo en cuerpo y no en alma. Duele, pero te tendré presente hasta el último de mis días. Te recordare como eras, alegre y juguetón. Llegaste a nuestras vidas para enseñarnos el verdadero significado del “amor” y la “lealtad” un perrito es la muestra de lo más hermoso y puro que existe en este mundo, aman a sus amos más que así mismo, sacrifican su propia vida por salvar a su dueño, tú y niño eran el claro ejemplo de la palabra; sé que ahora estas corriendo en las praderas del paraíso con nuestro pequeño niño, cada que mire el cielo de noche y vea las más brillantes estrellas juntas, sé que son ustedes, y que ya se encontraron nuevamente. No diré “adiós” porque esto, no es una despedida, es un hasta luego. Porque nos volveremos a encontrar.
Buen viaje amigo.
Doncan 21/07/2022.