"oh, sagrados sean los dioses que me han llevado a tus brazos,
como una hoja que cae suavemente de su árbol en el otoño,
sin resistencia, sin lucha, solo se entrega con tranquilidad.
me atrapaste entre tus brazos y nunca me soltaste, sin darte cuenta, como si yo ya fuera parte de ti.
tú eres la luna, yo soy el mar, maneja mis olas a tu antojo, mis mareas a tu gusto.
también té permito ser mi nube, toma el agua salada de mi alma y conviértela en agua dulce, como la risa de un bebé, como tu sonrisa, como tu amor.
En tus brazos, me siento en casa, donde el tiempo se detiene y el mundo desaparece. eres mi refugio, mi santuario, mi hogar, donde puedo ser yo mismo, sin miedo y sin dolor."