Hoy, he aprendido que la vida pasa. Que siempre acaba llegando algo bueno y que las palabras pueden hacer sangrar a cualquiera. Hoy, la vida sigue. Y sí, todo el mundo sabe las ataduras que eso conlleva. Siento deciros que vais a sufrir, y mucho, y por muchas tonterías de las cuales os gustaría arrancaros la cabeza. Que pasaréis del qué dirán. Que amaréis hasta reventaros el corazón y que este acabe hecho escombros. Sí, lo haréis. Y aprenderéis de ello. 
Que conoceréis a muchas personas y solo una de cada mil os acabará calando. 
Que ya no daréis todo a la primera de cambio. Encontraréis lugares nuevos que acabarán siendo el sitio habitual para quedar con amigos. Que sonreirás, y mucho. Y llorarás, también mucho. Que volverás a reconstruir tu corazón hecho trizas. Y ya no será tan fácil demolerlo. 
Y te dirás "que la vida pase no quiere decir que yo también pase de ella" e intentarás dejar huella. Dejando en el intento más de una. Porque es así, no siempre se deja huella donde uno quiere, pero aunque no te des cuenta, se deja. 
Y te recordarán. Y siempre habrá una persona que te recordará más de la cuenta. Porque nunca se atrevió a decirte que eras su alma gemela. Pero amigo, así es la vida.