De mi en realidad no hay muchos que saber, soy como cualquier adolescente. 
Admito que si hace unos meses me hubieran dicho que yo estaría leyendo todo lo que encontrase, me hubiera reído en sus caras, pero nada perdía con intentar, y aunque que ni yo creía al principio, esto se empezó a volver una maldita odseción para mi. Me empese a enamorar de cada personaje, a odiar, a reír, a llorar y sintiendome parte de lo que leía.
Leer se había volvido un jodido escape de la realidad, donde nadie me juzga, donde puedo ser yo sin temor.
Y amo leer, tanto sea por un libro de verdad o desde mi celular.