Pero no me puse a escribirles esto para hablarles de mí, lo hice porque quería desearles una feliz navidad (ya muy atrasada) y un año nuevo lleno de mucho amor, mucha paz y sobre todo mucha salud porque lo demás son solo añadiduras y siempre llegan aunque uno lo dude. Deseo que este nuevo año sepa reponer los pedacitos con que se quedó este 2020 que hoy, después de tan malos ratos y un par buenos también, se queda atrás. Quiero aprovechar también para agradecerles por seguir aquí, por su compañía durante estos 12 meses, porque aunque aparentemente mi función era distraerlos de tan malos acontecimientos, la que más disfrutaba cada actualización era yo porque con ella siempre llegaban sus comentarios llenos de diversión, algunos un poco más serios y otros tantos llenos de palabras bonitas agradeciendo lo que hago, cuando en realidad la agradecida soy yo de que hasta el día de hoy sigan eligiendo permanecer en los vagones de este tren. Así que gracias por la grata compañía que me regalaron, gracias a cada uno de los que se tomó el tiempo de leerme, gracias por cada uno de sus votos, por sus comentarios que siempre me hacen muy feliz, por sus mensajes al privado, por siempre tener algo bonito que decir y gracias por los buenos momentos que me regalaron, que espero poder retribuírselos pronto en el siguiente capitulo que ya va a la mitad y que anhelo poder regalarles pronto; y mientras eso sucede no me queda más que desear que las escritoras de las otras novelas que leen les regalen muchos capítulos de fin de año. (2/3)