Isabella es un patronímico henchido en docilidad, de hecho, tan sólo haberlo escrito hace algunas palabras atrás, aseguro que el almíbar fue capaz de sentirse. es quimérico y cargado de magnificencia, y como estamos en un intercambio sería injusto de mi parte no revelar el mío, por tanto, Paris es como se me ha designado.