- Hey, hola, vengo solo a quejarme, como siempre tengo que ser yo el que se queje, porque nadie mas lo haría y a nadie le va a importar. - posa un cigarrillo en sus labios y luego chasqueando sus dedos este mismo se enciende, le daba una larga calada y el humo sale por sus fosas nasales. - ¿No les pasa que quieren fumar y no los dejan? Si les ha pasado me van a entender, porque el guion original dice que no debo hacer nada que no sea "bueno", pero me parece una real estupidez, pero a lo que venia... - Su voz ronca solo dejaba ver la molestia que portaba. - A nadie le importa lo que se esfuerza Caín, a nadie le importa lo mucho que intenta hacer sus poemas con amor y su historia parece la vagina de una prostituta jubilada, llena de telarañas, es estresante eso, pero ustedes no lo ven, porque a nadie le importa o eso puedo pensar. - Luego de decir eso suelta una carcajada. - Le estoy hablando al vacío de sus pantallas, se les olvidara todo esto, como olvidan a las personas que no tienen tanta suerte como otros, eso es deprimente... - Desaparece y las tinieblas del lugar se dispersan, todo el alrededor estaba manchado con sangre.
~ Un Dios del Caos