"—Me llamarán Alteza— prometo con la frente en alto, varias lágrimas recorren mis mejillas y no me molestó en limpiarlas.
—¿Va en busca del corazón del delfín de Francea*?— pregunta la chica que estaba ajustando mi corset, en sus ojos podía observar el terror que le causaba mi declaración; pues fácilmente nuestra conversación podría ser catalogada como traición a la corona.
—No—niego, ella termina lo que estaba haciendo con el vestido estúpidamente apretado— voy por su reino, por su trono... Los destruiré. No quedará nadie de su linaje."